miércoles, mayo 17, 2006

Soneto al soneto

Para hacer un soneto me someto
al yugo de sus leyes terminantes
y con catorce lazos rutilantes
catorce veces la expresión sujeto.

Ya cincelado su primer cuarteto
engarzo cuatro afines consonantes
en los endecasílabos brillantes
de otra estancia y emboco en un terceto.

Ya entré.¡Avante! Lo grave es la salida.
Una frase lacónica es preciso
que al terceto final vaya prendida.

Salvaré, como pueda, el compromiso.
Verbigracia: el soneto es la bruñida
piedra de toque del decir conciso.

Félix Gávito Pedregal.

1 comentario:

Unknown dijo...

es un poema muy bonito

pero ademas me ayudo en mi tarea